TOMA ÁCIDOS GRASOS OMEGA3
Están presentes en aceites vegetales, frutos secos y semillas. Tomar aceites de calidad y añadir frutos secos, sin tostar, a nuestra dieta, beneficia la salud cardiovascular y, por lo tanto, las varices. Añade grasa vegetal de calidad a tu dieta para mejorar el estado de tus varices.

REDUCE EL CONSUMO DE SAL
El punto de sal es una cosa muy personal, pero el cuidado de las varices no lo es.

Cinco gramos diarios de sal es la cantidad que cabe en una cucharilla de postre y se trata de la cantidad ideal para no favorecer la retención de líquidos.

¡También debe tenerse en cuenta la sal que viene añadida en los alimentos! Exige cierto esfuerzo, pero es vital para beneficiar la circulación en nuestras piernas.